La legendaria camiseta
10 del Real Madrid fue utilizada por jugadores de toda clase, finos,
potentes y en algunas extrañas ocasiones por futbolistas que no tenían el
mínimo e talento para vestir el
emblemático número.
Húngaros, rumanos,
daneses, brasileños y holandeses hacen parte del reducido grupo de futbolistas
que tuvieron por piel la 10 merengue que
hoy le pertenece a un colombiano.
Uno de los más legendarios es sin duda alguna Ferenc Puskás,
un potente delantero nacido en Hungría que durante 8 años lleno de alegría a los hinchas
madridistas, “el comandante galopante” jugó 262 partidos en la casa blanca y anotó 242 goles, ganó 5 títulos de liga, una copa del Rey, una copa
Intercontinental y tres Copas de Europa
entre los años 1958 a 1966. Puskás es uno de los más grandes Ídolos del Real
Madrid.
El rumano Gheorghe Hagi, recordado no muy gratamente por el
pueblo colombiano, también fue uno de los privilegiados en utilizar la 10
Merengue, “Gica” como lo conocían disputó dos temporadas con el Real Madrid
entre los años 1990 y 1992 y tan solo ganó una Supercopa de España.
El heredero de la 10 que usó Hagi fue Michael Laudrup, un
media punta danés que arribó al Santiago Bernabéu en el verano de 1994 después
de ser gran figura con el Barcelona. Desafortunadamente no brilló de la misma
manera en la capital española, en dos temporadas jugó 62 partidos y tan solo
anotó 12 goles, se fue del Real Madrid levanto como campeón de la liga en 1995.
Un año después una pantera se adueñó de la emblemática camiseta,
el holandés Clarence Seedorf disputó 159 partidos en tres temporadas con el 10
en su espalda, anotó 20 goles y ganó una liga de España, una Supercopa
española, una Liga de Campeones y una Copa Intercontinental.
El 2000 fue un año que revolucionó al fútbol español, el
Real Madrid compró por una cifra estratosférica al entonces jugado y capitán
del Barcelona Luis Figo, 60 millones de euros desembolsó el club merengue por
el portugués que se convirtió en una pieza fundamental del equipo madrileño que
fue conocido durante los primeros años del siglo XXI como los galácticos.
Durante los 5 años en la institución el lusitano ganó dos ligas de España, dos
Supercopas españolas, una Liga de Campeones, una Supercopa de Europa y una Copa
Intercontinental.
Con el fin de la era de los galácticos, llegó la renovación
del plantel blanco, el brasileño Robinho tuvo la responsabilidad de vestir la
10, el delantero que en el principio de su carrera con el Santos de Brasil fue señalado
como el nuevo Pelé no pudo brillar como se esperaba. En tres años jugó 135
partidos y anotó 35 goles, gano con los blancos dos ligas locales y una
Supercopa de España, muy poco para el equipo más grande del mundo.
En 2007 Wesley Sneider heredó la 10, el talentoso volante holandés
jugó 123 partidos y anotó 26 goles, su juego no convenció a la exigente
hinchada madridista que lo vio partir dejando como legado una liga española y
una Supercopa de España.
Un capítulo aparte merece Lass Diarra que inexplicablemente
portó la legendaria camiseta 10 del Real Madrid por tres temporadas (2009 a
2012), un volante defensivo que se caracterizó por su juego brusco y poca habilidad con el balón, jugó 118 partidos y anotó 2 goles. En una época
poco productiva para los merengues el futbolista francés se fue de la capital
española con tres títulos locales: una liga, una Supercopa española y una Copa
del Rey.
Después de tres vergonzosos años, la 10 volvió a ser portada
por un jugador habilidoso, el alemán Mesut Ozil se vistió de blanco en el
verano de 2010 finalizada la copa del mundo de Sudáfrica donde fue gran figura
de su selección. El volante disputo 4
temporadas con el equipo merengue participó en 159 partidos y marcó 27 goles
que ayudaron al onceno madridista a ganar los tres torneos locales, liga, copa
del Rey y Supercopa de España. En el mejor momento de su carrera en Madrid, fue
vendido al Arsenal de Inglaterra por 50 millones de euros.
Ahora el dueño de la legendaria 10 del Real Madrid es el
colombiano James Rodríguez, que en un equipo plagado de estrellas debe
demostrar su talento valorado en 80
millones de euros para la institución blanca. Seguramente el volante cucuteño
no decepcionará a los hinchas y a los 47 millones de colombianos que hoy gritan
HALA MADRID!!!
